Derretimos la parafina a baño maría. Una vez líquida la  dividimos  la mitad en  recipientes pequeños y coloreamos  con negro, amarillo y verde, el resto lo reservamos sin color. Conservamos los  recipientes a baño maría.
Lubricamos con desmoldante toda la superficie interior del molde.
Con el termómetro medimos la temperatura de la parafina color negro, que deberá ser de 90° C. Sumergimos las cerdas del pincel completamente dentro del recipiente para empaparlo,  pincelamos a lo largo del molde, desde la mitad de la pirámide hacia abajo hasta completar los 2mm de espesor.
Biselamos con la espátula la parte exterior del molde y las canaletas interiores. A lo largo trazamos una línea ondeada retirando el exedente
Con el cuter dibujamos figuras geométricas asimétricas, separadas por calles, repitiendo este paso en todas las caras de la pirámide.
Retiramos el excedente de parafina dejando los dibujos geométricos calados.
Rellenamos los cuadros con los diferentes colores reservados en el baño maría.
Con parafina sin color a 75/80º pincelamos toda la parte superior de la pirámide hasta dar el mismo grosor que tiene la parte inferior ya dibujada.
Cerramos el molde en el lateral, atravesamos por el orificio un pabilo Nº12,  hacemos un nudo en la base, sujetamos con una varilla y envolviendo  bien la punta del molde con cinta de enmascarar sujetamos el pabilo dejando 5cm de largo. Por último colocamos un molde cualquiera para utilizar de apoyo.
Vertemos 1cm. de parafina sin color a 75°C. y sellamos los vértices interiores.
Rellenamos con bloques sólidos de parafina 66 y vertemos parafina a 75º hasta el borde del molde. Cuando se forme una capa sólida retiramos la varilla, hundimos el pabilo y recortamos los bordes para dar una terminación prolija a  la base de la vela.
Dejamos fraguar una hora y desmoldamos retirando las cintas de la punta y el lateral de la pirámide para poder desplegar el molde.